Estarán excluidas de la cobertura del seguro las producciones obtenidas de invernaderos en abandono
Gobierno de Canarias
Estas medidas se plasmarán en una orden ministerial que redefinirá las características del seguro colectivo del sector.
Se adopta tras una reunión del director general de Agricultura del Gobierno de Canarias, con Fedex, Aceto, Agroseguro y el MARM.
Domingo Bueno valora este cambio en la configuración de las pólizas, adoptado en beneficio de los agricultores de Canarias.
La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias ha incluido en las pólizas de seguros agrarios cobertura específica para los agricultores afectados por Tuta absoluta o polilla del tomate, propietarios de explotaciones que resulten dañadas pese a cumplir todas las condiciones fitosanitarias establecidas para evitar la plaga.
Así se acordó en la reunión que mantuvieron en días recientes en Madrid, el Director General de Agricultura, Domingo Bueno, y representantes del área de Sanidad Vegetal del Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino; la Entidad Nacional de Seguros Agrarios (Enesa); Agroseguro; la Federación de Exportadores de Productos Hortofrutícolas (Fedex); y la Asociación de Cosecheros y Exportadores (Aceto).
Las medidas acordadas en este encuentro con relación a los seguros del tomate, se plasmarán en una orden ministerial en la que se redefinirán las características del seguro colectivo de este cultivo específicas para Canarias.
Dicha orden determina que los seguros para el cultivo del tomate para la campaña 2010-2011 incluirán la cobertura de los daños ocasionados por Tuta absoluta para aquellas explotaciones que sufran daños, aun cumpliendo con todas las medidas de control de esta plaga. En este caso, la enfermedad adquiere la condición de "no controlable" para el agricultor y el seguro cubre los gastos derivados del levantamiento o reposición del cultivo de las producciones aseguradas afectadas que cumplan estos requisitos.
Estarán excluidas de la cobertura del seguro las producciones obtenidas de invernaderos en abandono, destinadas al autoconsumo y las plantaciones que se realicen con posterioridad al 31 de enero. El Director General de Agricultura, Domingo Bueno, señaló que esta medida "representa un logro importante para un sector tan necesitado como es el tomate de exportación, y al que las plagas han ocasionado un gran daño".
"Han sido negociaciones duras pero finalmente se ha conseguido un cambio en la cobertura de las pólizas en beneficio del agricultor de Canarias, que merece todo nuestro respaldo, cada vez más concienciado de la importancia de mantener en perfecto estado sus instalaciones y de aplicar el código de buenas prácticas recomendado por la Consejería para evitar la afección de plagas", concluyó Domingo Bueno.
Por su parte, el presidente de la Cooperativa Agrícola de La Aldea de San Nicolás (Coagrisán), Jacinto Godoy, presente en la reunión, se mostró muy satisfecho por la introducción de esta cobertura, que según afirmó, constituye una protección para el cultivo, y es fruto del esfuerzo conjunto de los agricultores y la Consejería.
Entre las medidas establecidas en la norma para beneficiarse de esta cobertura, destacan la instalación en los invernaderos de malla en bandas y cumbrera con una densidad mínima de 6x9 hilos por centímetro cuadrado, el empleo de trampas cromáticas entre ambas puertas, la reparación de todas las roturas o agujeros que puedan presentar las mallas y el cuidado de los alrededores de la parcela, que deben mantenerse siempre limpios de malas hierbas y restos de cultivo.
Se insiste en la importancia de realizar un control biológico, químico y biotecnológico de la plaga a partir de productos químicos específicos para su tratamiento y trampas de feromonas sexuales por monitoreo. Estas medidas coinciden con las recomendaciones realizadas por la Dirección General de Agricultura del Gobierno de Canarias, desde que se anunció la entrada de la polilla del tomate en las Islas en diciembre de 2008.
La Consejería de Agricultura ha desarrollado una intensa labor para el control de la plaga. A principios de 2009 se activó un plan para evitar su expansión en las Islas, que contemplaba, entre otras medidas, la puesta en marcha de un programa de acciones informativas sobre Tuta absoluta destinadas a concienciar a los productores de la necesidad de mantener en buen estado sus invernaderos.
Desde la pasada campaña, la Dirección General de Agricultura ha distribuido gratuitamente a los agricultores trampas de feromonas, cápsulas con un atrayente sexual para machos del insecto que se colocan en el terreno, y trípticos informativos adaptados a las principales novedades en el estudio de la plaga
Otras medidas
En la reunión se acordó la actualización de los costes de reposición y levantamiento, que pasarán de 24.000 euros por hectárea en la campaña de 2009-2010 a 25.500 euros por hectárea para el próximo año. Además, como novedad, las entidades comercializadoras tendrán la opción de elegir el periodo de cobertura de los seguros, hasta el 30 de abril o 30 de mayo; y al tratarse de seguros colectivos serán los productores con más riesgo de siniestro los que afrontarán mayor proporción del pago de la prima.
También se ha dispuesto elaborar un protocolo de peritación de daños adaptado a los métodos modernos de cultivo, para el que se creará un grupo de trabajo compuesto por técnicos del sector, de Agroseguro y de la Consejería de Agricultura, y se revisarán los criterios de cálculo de rendimientos de cada organización productora, incluyendo el cómputo de la producción perdida a nivel de parcela.