La Consellería de Agricultura mantiene dos sistemas de que ofrecen información semanal, que se suman al ofrecido por la Lonja de Cítricos
Boletín Agrario
Actualmente existen en la Comunitat Valenciana hasta tres sistemas diferentes en los que se reflejan los precios en origen que perciben los productores de naranjas, clementinas y demás cítricos. La organización agraria La Unió de Llauradors considera este hecho como síntoma de una «descoordinación, y al final evidencia que los citricultores no disponen de una estadística fiable»
Actualmente existen en la Comunitat Valenciana hasta tres indicadores de precios en origen de los cítricos, denuncia la organización agraria levantina Unió de Llauradors. Aparte del índice de precios ofrecido por la Lonja de Cítricos, organismo perteneciente a la Cámara de Comercio de Valencia y por tanto de carácter privado, existen otros dos indicadores netamente públicos y dependientes de la Administración regional valenciana.
La Unió considera que este hecho es un reflejo de la «descoordinación» existente, lamentando que al final son los agricultores los que salen más perjudicados, ya que no pueden disponer de una estadística fiable: «La Conselleria de Agricultura facilita en estos momentos los precios de los cítricos a través de dos vías y las dos semanales, por una parte sus precios agrarios semanales que desde hace unos años sólo facilitan las cotizaciones máximas y por otra parte, desde hace tres campañas, también facilita los precios a través del Observatorio de Precios Agroalimentarios de la Comunitat Valenciana».
Los servicios técnicos de la organización agraria han elaborado un estudio comparativo en el que resaltan las diferencias existentes entre los distintos precios en origen registrados por cada una de las tres fuentes. Así nos encontramos que, mientras que la Lonja de Cítricos refleja que la media semanal de este año ha crecido un 11% respecto a la registrada el año anterior, la media de precios máximos semanales de la Conselleria muestra un incremento del 16%, mientras que el Observatorio (precios medios) lo hace en nada menos que un 35%.
Críticas a los métodos de muestreo
Sin duda que entre el 11% de la Lonja y el 35% del Observatorio existe un margen diferencial demasiado exagerado para tratarse de un mismo objeto coincidendo en tiempo y espacio.
La Unió critica las diversas metodologías(*) empleadas en cada uno de los tres indicadores, llegando a decir de alguno de ellos que «se trata de una aportación de datos tal y como se hace en los bares de los pueblos donde acuden los compradores y vendedores». Algo que puede ser efectivo para tener una referencia, continúan, «pero en ningún caso se trata de un método homologado para conocer la evolución real de los precios citrícolas y aplicarse a estudios que sirvan para mejorar la formación de los precios en el sector».
En este sentido desde la organización agraria reclaman que se utilice como precio de referencia el valor real que aportaría una media extraída de los contraros de compra venta, ya que «su base de datos serviría como referencia real de los precios en origen».
«Ese precio lo quiero para mi cosecha»
Aparte de las divergencias entre los tres indicadores y de las críticas a sus métodos de construcción de los precios, en su nota de prensa la Unió sugiere el aspecto más criticado por los productores ante este tipo de indicadores, algo que podemos corroborar por nuestra experiencia con los datos semanales aportados por el Ministerio de Agricultura y el Observatorio de Boletín Agrario: ¿Realmente estos son los precios que perciben los agricultores o están inflados para maquillar los diferenciales existentes entre los distintos tramos de la cadena y la rentabilidad agraria?
«Otra circunstancia que se comenta mucho entre los productores citrícolas es que los precios de los diversos organismos están demasiados hinchados. Más de un citricultor cuando los ve expresa en voz alta, “ese precio de mi variedad lo quiero para mi cosecha”», indica la Unió en este sentido. Una suspicacia que se disiparía si se utilizaran los precios reales reflejados en los contratos en origen, como pide la organización agraria valenciana.
(*) La Unió explica los distintos sistemas empleados para fijar los precios de los cítricos en cada uno de los tres indicadores existentes en la Comunitat Valenciana: «El sistema utilizado porla Lonja para marcar un precio de referencia semanal se realiza mediante una ronda de consultas en la que cada vocal proporciona una horquilla de precios y opina sobre la tendencia del mercado. Tras este debate, se fijan por consenso los precios de las distintas variedades, que son la media pura de las cotizaciones propuestas por los miembros de la Mesa. Por su parte, el procedimiento de los precios semanales de la Conselleria de Agricultura se efectúa a través de una red de informadores a lo largo de todas las zonas citrícolas de la Comunitat mediante un sistema normalizado aunque sólo se especifican las cotizaciones máximas. Los datos publicados en el Observatorio Agroalimentario corresponden al valor medio del intervalo definido por el valor mínimo y máximo de los precios más frecuentes registrados en la semana a la que se refieren, según la información de la red de colaboradores de precios en origen de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación (CAPA)».