Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

Los socios de la cooperativa Campo Segoviano II exigen el pago urgente por la deuda de PROINSERGA

Los grandes perjudicados son los aproximadamente 300 agricultores socios de la cooperativa

ASAJA

La deuda total que mantiene PROINSERGA con CAMPO SEGOVIANO supera los 3,8 millones de euros (por encima de 600 millones de pesetas) por la venta de su grano. Los agricultores saben que no podrán cobrar el monto total de la deuda pero es absolutamente urgente que puedan saber cuánto y cuándo cobrarán.

La solución al proceso judicial provocado por la declaración de concurso de acreedores de la empresa Proinsega avanza muy lentamente. Las compañías ligadas al holding están ya en proceso de liquidación, las entidades acreedoras y los trabajadores, en mejores o peores condiciones, saben su futuro. En todo este entramado los olvidados, y los grandes perjudicados, son los aproximadamente 300 agricultores socios de la cooperativa CAMPO SEGOVIANO II, suministradores de cereal para las fábricas de piensos, a los que Proinserga S.A. dejó sin pagar toda su cosecha del 2007, el trabajo de un año entero, hasta ahora, perdido. Precisamente la compañía matriz es la única que mantiene su actividad de elaboración de piensos en las fábricas de Fuentepelayo, pero lo hace en una especie de limbo judicial a la espera de una resolución definitiva del magistrado competente en el caso.

La deuda total que mantiene con CAMPO SEGOVIANO supera los 3,8 millones de euros (por encima de 600 millones de pesetas) por la venta de su grano. Los agricultores saben que no podrán cobrar el monto total de la deuda pero es absolutamente urgente que puedan saber cuánto y cuándo cobrarán. En la actual situación de crisis y carencia de financiación los agricultores de la provincia han acabado ya con las reservas que un día pudieron mantener. Ahora afrontan los pagos de los medios de producción de la nueva cosecha sin disponibilidad alguna. El desproporcionado incremento de los precios de los fertilizantes, los fitosanitarios y la energía, frente a la caída del precio del cereal en los últimos dos años, ha generado pérdidas reales en la mayor parte de las explotaciones y hoy la situación es ya límite.

Por eso en CAMPO SEGOVIANO, cooperativa ligada a ASAJA Segovia, consideramos urgente, imperiosa, la resolución del expediente concursal de Proinserga. Los tres años transcurridos se debe considerar tiempo más que suficiente. La Justicia ha seguido trabajando. Los administradores judiciales han elevado ya su informe y ahora debe seguir la sentencia del juez. Luego el proceso seguirá su curso y vendrán las posibles apelaciones de las partes, que dilatarán más el proceso. Pero para llegar a la meta es necesario ir superando etapas y lo que no es admisible es que cada una de ellas dure tres años, todo el periodo que hasta ahora han aguantado los agricultores sin compensación alguna.

Además, ASAJA Segovia quiere poner de manifiesto el daño sufrido por el sistema cooperativo agrario que siempre se ha considerado algo necesario y beneficioso para el desarrollo del sector, pero que se ha movido entre fracasos e incomprensiones que han hecho muy difícil su despegue definitivo en la provincia. El fracaso de la propia Proinserga, que se inició como una cooperativa ganadera, y la situación de impago que sufre CAMPO SEGOVIANO han hecho crecer todos los resquemores, han desatado graves diferencias y hasta hostilidades algunas veces entre los productores.

Por eso es preciso que toda la sociedad segoviana se sensibilice y que el sistema judicial propicie una resolución urgente al proceso de Proinserga insuflando una importante aportación financiera a los agricultores de la provincia, que la necesitan como oxígeno para sobrevivir, después de tres años de deudas y retrasos.