Evaluación de daños en Valencia por el episodio de pedrisco del pasado sábado 28 de julio
Según informa La Unió de Llauradors, los principales daños se han dado en algunas partidas de Ontinyent
La Unió de Llauradors hace una evaluación de los daños sufridos en los cultivos de diversas comarcas de la provincia de Valencia a causa de la tormenta de agua y abundante pedrisco ocurrido el pasado sábado 28 de junio . Según informan, el episodio climatológico se produjo durante poco tiempo, pero destacan que el pedrisco "era de gran tamaño".
LA UNIÓ de Llauradors informa que la tormenta de agua y abundante pedrisco del pasado sábado ha afectado fundamentalmente a los cultivos agrícolas de zonas de la Vall d’Albaida, la Costera y la Ribera en la provincia de Valencia.
La franja más dañada comprende las localidades de Ontinyent, Aielo de Malferit, Albaida, Benissoda, Fontanars i Moixent (en la Vall d’Albaida y la Costera); aunque también hay daños en las localidades de Carlet, Alginet, Tous o Catadau ya en la Ribera Alta.
Durante pocos minutos (entre veinte o treinta aproximadamente) cayó una gran cantidad de piedra de considerable tamaño. Los cultivos más afectados por la tormenta son la viña, olivos, hortalizas (melones sobre todo) girasol y algunos frutales (caqui o ciruelos, entre otros). Habrá que esperar aún unas semanas para ver cómo ha afectado el pedrisco al cultivo de los cítricos, aunque ya se puede indicar que en el caso de haber afección ésta ha sido muy localizada.
La incidencia de los daños varía según las parcelas aunque la afección general es bastante grande en determinadas parcelas de la Vall d’Albaida. En algunas partidas rurales de la población de Ontinyent la afección es del 100%. Por lo que se refiere al caqui de la Ribera los daños están muy localizados y se sitúan entre un 10 y un 20%.
En la comarca de Els Ports también cayó piedra aunque iba acompañada de abundante agua y además no afecta en estos momentos a los cultivos que existen en la zona.
No obstante lo anterior las lluvias de este fin de semana ha sido muy bien recibidas en el campo ante la ausencia de las mismas en los últimos meses y los síntomas de sequía que se detectan ya en algunas zonas de nuestra geografía.