Un piquete francés destruye la carga de un camión de frutas español
Trasladan al Gobierno y las instituciones europeas el profundo malestar del sector productor español
Un piquete de agricultores franceses que protestaban contra las importaciones españolas de frutas ha destruido el cargamento de un camión español que llevaba melocotones y paraguayos. Los productores galos culpan a los españoles de los bajos precios que se están registrando en la presente campaña de frutas, mientras que éstos intentan descargar su indignación exigiendo a Europa que intervenga
El incidente se ha producido en la localidad fronteriza de Le Boulou, a escasos kilómetros del paso del Perthus (A9). El camión llevaba un cargamento de melocotones y paraguayos, según informan desde las organizaciones agrarias españolas.
Los agricultores franceses culpan a los españoles de haber hundido los precios de la fruta. Una acusación que contrasta enormemente con la difícil situación que atraviesan los productores de este país, especialmente por culpa de estos "ruinosos" precios. "Los productores franceses intentan responsabilizar a la producción española de los bajos precios de la fruta, a pesar de que el sector en España se encuentra en una situación muy grave, ya que la campaña se está desarrollando con escaso volumen de ventas y precios por debajo de los costes de producción", se lamentan desde Coag, a la vez que recuerdan a los franceses que "al tratarse de un mercado único, la situación afecta lógicamente a todo el sector frutícola europeo".
En este mismo sentido se ha manifestado Ramón Mampel, secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders, quien ha dicho que "las actitudes de nuestros homólogos franceses dejan bastante que desear en pleno siglo XXI porque el enemigo no somos nosotros sino la gran distribución". Desde esta organización agraria también recuerdan a los agricultores franceses "que yerran en la dirección de sus protestas pues atacar nuestras frutas y hortalizas agrava la crisis de precios y que hay que luchar conjuntamente por romper el abuso de posición de dominio de la gran distribución europea a la hora de fijar precios, así como exigir que las importaciones de terceros países cumplan con las mismas condiciones de calidad, seguridad alimentaria y respeto al medio ambiente que se nos exige a los agricultores europeos".
Estas organizaciones agrarias piden al Gobierno español que "exija responsabilidades al Gobierno francés" y que exija a las autoridades comunitarias "que se garantice la libre circulación de nuestras frutas y hortalizas". Desde la Unió aprovechan para cargar contra las políticas comunitarias: "la Unión Europea en lugar de frenar el abuso de la gran distribución, que comporta precios ruinosos para el productor sin que baje el precio para el consumidor, continua liberalizando el mercado agrario, favoreciendo la importación de productos de terceros países a bajo precio y sin reclamar que se les aplique la misma normativa y condiciones que a nosotros", ha declarado Mampel.