Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

La ministra Rosa Aguilar ha destacado hoy en su comparecencia ante el Senado "la fortaleza del sector agroalimentario español", realizando un balance positivo para el año 2010, del que destaca "la modernidad, competitividad y proyección internacional" de este sector, como recoge el propio MARM en su nota de prensa. La responsable del Agro ha sostenido esta lectura basándose en la evolución positiva de la Renta Agraria, que refleja un crecimiento del 6,5% por Unidad de Trabajo Anual (UTA) .

"Si nos comparamos con países de nuestro entorno, se observan reducciones en Reino Unido, Grecia e Italia del -3% al -8% y con un comportamiento similar Portugal", destacaba la Ministra. En la nota del MARM también podemos leer que "los aumentos producidos en países como Francia o Alemania se producen después de importantes descensos de 2009".

Rosa Aguilar ha subrayado que el Partido Popular está realizando un balance catastrofista del ejercicio 2010, algo que también se destaca desde el propio MARM. Parece necesario recordar desde esta humilde publicación que los datos tan positivos de la Renta Agraria no sólo han sido criticados desde ASAJA, digamos que la organización agraria más afín al PP. UPA afirmaba que "el aumento estimado por el MARM para el año 2010 viene respaldado por una fuerte revisión a la baja del dato del año 2009, ya que la mayor parte de los sectores agrícolas y ganaderos han visto como durante el año que ahora termina, el valor de sus producciones se ha estancado", en una nota de prensa en la que destacaba que la Renta Agraria apenas ha crecido en diez años. Por su parte la Coordinadora, digamos que «el mayor apoyo» de Mariano Rajoy, lanzaba una acusación directa contra el Ministerio de Rosa Aguilar: "COAG pone en tela de juicio la primera estimación del MARM sobre la evolución de la Renta Agraria" , denunciando que desde el Ministerio se han modificado a la baja los datos de los años anteriores y mostrando claras puebas de ello:

Datos: MARM. Expresado en millones de euros.

Como podemos comprobar no sólo se revisan a la baja los datos de febrero de 2010 relativos al ejercicio 2009, también caen los de 2008, que ya en aquella revisión parecían tan definitivos (apenas varían 1 décima de millón entre diciembre de 2009 y febrero de 2010). En dicembre en cambio su descenso es de más de 1.500 millones de euros. Algo menos que en el caso de 2009, que desciende entre febrero y diciembre del pasado año en 1732,8 millones. Digamos que, en este último caso, tal revisión a la baja podría responder al reajuste de los datos de febrero, quizá demasiado provisionales. Pero, ¿y en el caso de 2008, de qué datos se disponía el pasado mes que no se contemplasen en la levísima revisión de febrero? No me lo creo, y esto último es lo único que hasta ahora es una opinión, ya que el resto son datos fácilmente contrastables. Además, el valorativo apunte que desde el MARM se realiza de las rentas agrarias de los colosos Francia y Alemania reafirma mis sospechas (opinión, creencia...). Fue lo que pensé al contrastar la información de COAG y es lo que hoy creo, aún más, digo.

Haciendo un ejercicio de política ficción y partiendo de que los datos anteriores a diciembre no hubiesen perdido peso cual jamones en secadero, tendríamos que los 22.547,5 millones de euros que refleja la estimación provisional para el 2010 serían inferiores a los números de 2008 y 2009. Y estaríamos hablando por tanto de una evolución negativa en la Renta Agraria. Entonces, digo yo, ¿debería cambiar la estimación sobre nuestro agro a lo largo de 2010, siguiendo con el supuesto?

Pues ahora vuelvo a saltar a la realidad y afirmo que las explotaciones que han tenido que cerrar son exactamente las mismas que en el supuesto de antes. Similar sería también el precio del grano, del pienso, el de la urea, el del combustible... Y por desgracia también resultarían ser idénticos los precios en origen... En definitiva, que no soy yo el único al que gusta realizar ejercicios de política fición. Realizar un balance anual completo de un sector tan extenso, diversificado y complejo como éste, suma de una y un millón de realidades basándose, insitisto, en el número de agricultores cubiertos por el Plan de Seguros Agrarios o en los fríos datos de una renta agraria revisable «a ojo de buen cubero» no deja de ser, como mínimo, una visión demasiado reducida de todo lo que ha ocurrido en nuestro campo durante el pasado año.

Cifras positivas en las exportaciones

Evidentemente que nuestros sectores agropecuarios son envidiables, loables las políticas de modernización y fomento de la competitividad, por no hablar de las iniciativas encaminadas a fortalecer la proyección internacional de nuestros productos. Chapó por las buenas cifras en los balances de aduanas. "Entre otros datos, la ministra ha explicado que la evolución del saldo comercial exterior agrario-alimentario ha sumado cerca de 4.300 millones de euros en los diez primeros meses de 2010, lo que supone un incremento del 28%. Asimismo, el comercio exterior de la Industria Agroalimentaria ha tenido una evolución muy favorable en 2010, incrementando hasta los 1.122 millones de euros, cerca de un 120%, el saldo obtenido en los diez primeros meses de 2009", resumen desde el MARM estas cifras aportadas hoy por la Ministra a nuestros representantes en la Cámara Alta.

Enhorabuena, insisto, pero también subrayo que estos datos son quizá demasiado globales, digamos que «multinacionales», como para que su eco llegue con demasiada fuerza a las «remotas» granjas del Alto Ampurdán, por poner un ejemplo. Nuestra agricultura y ganadería necesitan, hoy más que nunca, un verdadero ejercicio de análisis en el que se tengan en cuenta todos los factores que les afectan, independientemente de intereses que nada tienen que ver con la producción agraria. El dignísimo sector de las avestruces inclusive.

Artículo de opinión de Alonso Aguilar para Boletín Agrario