Vigilancia del estado nutricional de los árboles frutales
Texto perteneciente al capítulo 25 de la «Guía práctica de la fertilización racional de los cultivos en España», dedicado al abonado de los frutales caducifolios
Es muy recomendable hacer un seguimiento continuo de los niveles de elementos minerales tanto a nivel edafológico como en los propios árboles. A continuación se recogen los principales análisis recomendados, tanto para los suelos dedicados al cultivo como de las del material vegetal (en los frutales se emplea el análisis mineral de hojas), así como su correcta periodicidad.
Durante la vida de la plantación es deseable evaluar periódicamente los niveles de elementos minerales en el suelo y en el árbol.
La regularidad del control facilita la puesta al día de tendencias. Éstas, muestran al fruticultor el efecto en el tiempo de las prácticas culturales, más allá de la simple acción de regar o fertilizar.
Análisis de suelo
Se realizará por un laboratorio especializado sobre una muestra representativa de la parcela. La periodicidad y los componentes a determinar serán:
- Cada 3-5 años: textura, capacidad de intercambio catiónico (CIC), pH, materia orgánica, carbonato cálcico.
- Cada año: conductividad, nitrógeno, fósforo, potasio, calcio y magnesio.
Análisis de material vegetal (hojas)
Para las distintas especies de frutales, se utiliza el análisis mineral de hojas como elemento de diagnóstico y control. Para obtener referencias fiables de un año para otro, tanto el tipo de ramo, hoja y su situación, el número de árboles muestreados y la fecha de toma de muestras, deben ser escrupulosamente respetados (tabla 25.10).
Tabla 25.10. Épocas de muestreo de hojas en frutales | |
Especie | Época de muestreo |
Albaricoquero melocotonero | A 105 días del estado F2 |
Cerezo | En recolección o 45 días después de F2 |
Ciruelo | Unos 70 días después de F2 |
Manzano y peral | Unos 75 días después de F2 |
Fuente : Soing P. et al. (1999) | F2= 50-60% de flores abiertas |
Como este tipo de análisis hay que realizarlo en una fase avanzada del crecimiento de ramos y frutos, los resultados únicamente son aplicables para corrección de las aportaciones finales y del abonado global del año siguiente.
En función de los resultados de los análisis de muestras de hojas, y para aplicar las oportunas correcciones sobre las cantidades de cada elemento mineral aportado el año anterior, se pueden utilizar como referencia los niveles adecuados de elementos minerales en hoja que para las distintas especies figuran en la tabla 25.11.
Tabla 25.11. Niveles críticos de elementos minerales en hoja de árboles frutales caducifolios | ||||||||||||
Especie | % sobre materia seca de hoja | ppm sobre materia seca de hoja | ||||||||||
Nitrógeno (N) | Potasio (K) | Magnesio (Mg) | Calcio (Ca) | Cloro (Cl) | Sodio (Na) | Boro (B) | Zinc (Zn) | |||||
Defic. < | Adec. > | Defic. < | Adec. > | Adec. > | Adec. > | Exce. > | Exce. > | Defic. < | Adec. > | Exce. > | Defic. < | |
Manzano | 1,9 | 2-2,4 | 1 | 1,2 | 0,25 | 1 | 0,3 | - | 20 | 25-70 | 100 | 14 |
Albaricoquero | 1,8 | 2-2,5 | 2 | 2,5 | - | 2 | 0,2 | 0,1 | 15 | 20-70 | 90 | 12 |
*Cerezo | - | 2,5-2,8 | 0,9 | 1,75-2 | 0,25-0,4 | 1,5-2 | - | - | 20 | - | - | 10 |
Melocotonero | 2,3 | 2,4-3,3 | 1 | 1,2 | 0,25 | 1 | 0,3 | 0,2 | 18 | 20-80 | 100 | 15 |
Peral | 2,2 | 2,3-2,8 | 0,7 | 1 | 0,25 | 1 | 0,3 | 0,25 | 15 | 21-70 | 80 | 15 |
Ciruelo | - | 2,3-2,8 | 1 | 1,1 | 0,25 | 1 | 0,3 | 0,2 | 25 | 30-60 | 80 | 15 |
Higuera | 1,7 | 2-2,5 | 0,7 | 1 | - | 3 | - | - | - | 300 | - | |
Adaptado de K. Uriu, J. Beutel, O. Lilleland y C. Hansen-Dept. de Pomología, UC-Davis. | ||||||||||||
*Adaptado de Huguet C., Ctifl-1990. | ||||||||||||
Fuente : Sparcks B., FRUIT GROWER (Abril 2011) |
No obstante, lo ideal sería disponer de tablas específicas para las distintas variedades de cada área de producción y utilizar algún método que permita calcular, de forma sencilla, las correcciones de nutrientes que debemos aportar en el siguiente plan de fertilización.
Resumen final
El análisis del suelo permitirá conocer el estado de los elementos minerales en el mismo, y el análisis de hojas permite revelar la forma que el árbol los utiliza en función de las condiciones de cultivo. El conocimiento de ambos, permitirá:
- Ajustar la fertilización.
- Prevenir situaciones de fuertes desequilibrios.
- Conservar el árbol con un elevado potencial de producción de calidad durante su vida útil.
- Reducir los problemas de contaminación por nitratos.
Realizados todos los años, permiten a medio plazo, seguir tendencias y reajustar la fertilización
(*) Guía Práctica de la Fertilización Racional de los Cultivos en España
José Luis Espada Carbó.
Ingeniero Técnico Agrícola
Centro de Transferencia Agroalimentaria.
Departamento de Agricultura y Alimentación. Gobierno de Aragón
Exigencias de clima y suelo para el cultivo de árboles frutales
Texto perteneciente al capítulo 25 de la «Guía práctica de la fertilización racional de los cultivos en España», dedicado al abonado de los frutales caducifolios
Conoce los requisitos generales de clima y suelo necesarios para un óptimo cultivo de árboles frutales. A la hora de emprender una plantación se debe hacer una cuidadosa revisión de los distintos factores que se relacionan a continuación. También se describen los factores a tener en cuenta a la hora de establecer un plan de fertilización en cultivos de frutales