Una exposición para "lavar la imagen" del tiburón
Se trata de la muestra "A favor de los tiburones, un mar de esperanza", ahora en la Casa de la Ciencia de Sevilla
La Casa de la Ciencia de Sevilla, centro de divulgación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, se suma a la complicada tarea de lavar la imagen de uno de los depredadores más grandes de la cadena trófica marina, el tiburón. Perteneciente, junto a las rayas y los elasmobranquios, a uno de los grupos taxonómicos de vertebrados más antiguos del planeta, con 400 millones de años.
Esta muestra que lleva por nombre "A favor de los tiburones, un mar de esperanza", podrá ser visitada hasta el próximo 29 de mayo en La Casa de la Ciencia de Sevilla. Se enmarca dentro de una campaña de sensibilización que busca difundir las amenazas que acechan a la fauna marina, especialmente los elasmobranquios, y los proyectos de conservación que se llevan a cabo para protegerla y conservarla.
Barcelona ya ha acogido esta exposición que llega ahora a Sevilla como parte de su itinerancia. Ha sido producida por la Fundación CRAM para la Conservación y Recuperación de Animales Marinos, con la colaboración de Fundación Biodiversidad, con la participación de "la Caixa", y logística a cargo de Fundación Seur.
La muestra propone cuatro bloques de contenidos:
- La fragilidad del tiburón
- ¿Depredador o víctima?
- Acciones contra la extinción
- Acciones locales CRAM
Contará con visitas guiadas gratuitas a cargo de monitores formados que explicarán los contenidos, sobre todo pensado para los grupos de escolares que acudan previa solicitud de sus centros educativos, a través del correo electrónico belen.rodriguez@orgc.csic.es Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla o en el teléfono 954 23 23 49 (Ext 144).
Objetivo: conservación y cambio de la percepción pública
Explican los especialistas de CRAM que los tiburones suelen tener entre la ciudadanía la imagen de animales agresivos. Para comprobar esta apreciación basta sólo con recordar alguno de los muchos filmes en los cuales un despiadado tiburón asola una concurrida playa llevándose a las fauces al primer bañista que encuentra a su paso. No obstante, la exposición persigue cambiar la percepción pública sobre estas especies y explicar que la situación es totalmente opuesta; son los tiburones las víctimas de un conjunto de amenazas que en algunos casos como el del tiburón blanco están provocando que incluso sea catalogado en peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Estas amenazas son la pérdida de su hábitat; la contaminación marina; y sobre todo la sobreexplotación pesquera, razón por la cual estiman los científicos que cada año mueren más de cien millones de tiburones. Es conocido que algunas partes de estas especies son especialmente cotizadas en los mercados. Es el caso de sus aletas, que en algunos países asiáticos llega a alcanzar el precio de 500 euros por kilogramos; situación que fomenta actividades ilegales y en extremo crueles, como el "finning", que consiste en cercenar las aletas de los tiburones y desechar el cuerpo al mar muchas veces cuando el animal aún está vivo, para así ahorrar espacio en las bodegas de los pesqueros y almacenar todas las aletas posibles.
Lucha por los tiburones amenazados
Informe de la organización Oceana en el que alerta de la situación de desamparo del tiburón
Los tiburones son especies extremadamente vulnerables que, durante décadas, han sido capturados por los barcos de la UE tanto en aguas europeas como fuera de ellas, sin ninguna gestión. El 21% de las poblaciones de tiburón, raya y quimera del mundo están amenazadas de extinción según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en ingles).