Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

Una mejor nutrición pasa por transformar los sistemas alimentarios

Más de la mitad de la población mundial está afectada por alguna forma de malnutrición, ya sea el hambre, la carencia de micronutrientes o el consumo excesivo de alimentos

FAO

Existen graves problemas nutricionales que afectan a más de la mitad de la población mundial y los sistemas alimentarios tendrán que sufrir cambios importantes para mejorar las dietas y las vidas de las personas, según se advirtió esta semana en un encuentro organizado por la FAO y la OMS.

Existen graves problemas nutricionales que afectan a más de la mitad de la población mundial y los sistemas alimentarios tendrán que sufrir cambios importantes para mejorar las dietas y las vidas de las personas, según se advirtió a representantes de los países y expertos al inicio del encuentro organizado por la FAO y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El evento, que tuvo lugar del 13 al 15 noviembre, es una reunión técnica preparatoria que pretende sentar las bases de la Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN-2), que tendrá lugar del 19 al 21 de noviembre de 2014. Su objetivo es impulsar la coordinación de los esfuerzos internacionales para abordar los factores agrícolas, económicos, sanitarios, de los sistemas alimentarios y otros que influyen negativamente sobre qué y cómo se come, sobre todo en los países en desarrollo.

The young

"The young"

16-10-2012Alex Proimos (CC-by)

Retrato de la sociedad de consumo y la infancia en los estratos sociales excluídos. Cerca de 870 millones de personas, una octava parte de la población mundial, padecían subnutrición crónica en el período 2010-2012, según el informe SOFI de la FAO, FIDA y PMA (9-10-2012)

"Está claro que la forma en que los alimentos se manejan actualmente no se refleja en suficientes mejoras en materia de nutrición. El hecho más sorprendente es que más de 840 millones de personas siguen padeciendo hambre hoy en día, a pesar de que el mundo ya produce suficientes alimentos para todos, un tercio de los cuales se desperdician", dijo José Graziano da Silva, Director General de la FAO.

"Pero esto es sólo parte del problema –continuó-. Hoy, más de la mitad de la población mundial está afectada por alguna forma de malnutrición, ya sea el hambre, la carencia de micronutrientes o el consumo excesivo de alimentos".

La cantidad total de alimentos que se producen y no se consumen sería suficiente para alimentar a 2.000 millones más de personas. La verdad es que, hoy en día, los consumidores no reciben las señales correctas de las políticas vigentes sobre cómo alimentarse de forma saludable. Eso es lo que tenemos que abordar", añadió Graziano da Silva.

Mientras 842 millones de personas sufren hambre crónica, muchas más mueren o sufren los efectos nocivos de una nutrición inadecuada. Cerca de 2 000 millones de personas se ven afectadas por la carencia de micronutrientes. Alrededor de 7 millones de niños mueren antes de su quinto cumpleaños cada año, 162 millones de niños menores de cinco años sufren retraso del crecimiento y, al mismo tiempo, 500 millones de personas son obesas.

Teniendo en cuenta la magnitud de la malnutrición y sus efectos en el desarrollo sostenible a nivel más amplio, el Director General reiteró el apoyo de la FAO y los otros dos organismos alimentarios de la ONU con sede en Roma -El Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA)- para la inclusión de un objetivo independiente sobre seguridad alimentaria y nutrición en la agenda post-2015 para el Desarrollo, según lo recomendado por la Consulta de Alto Nivel sobre hambre, seguridad alimentaria y nutrición, que tuvo lugar el pasado mes de abril en Madrid.

Hans Troedsson, Director Ejecutivo de la Oficina del Director General de la OMS, también pidió un replanteamiento de la forma en que se gestiona el sistema alimentario, asegurando que la dieta es un factor clave en la carga global de enfermedad y que los desafíos polifacéticos de la nutrición necesitan ser abordados a diferentes niveles, desde la infancia a la madurez.

"Si en el pasado nos enfrentábamos principalmente al desafío de la malnutrición infantil, hoy nos enfrentamos a una epidemia de dietas inadecuadas y escasa actividad física, lo que conduce a la hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, diabetes y sobrepeso", indicó Troedsson.

"Las amenazas a la nutrición y la salud en realidad se han ampliado y agravado y no van a desaparecer por sí solas. Tenemos que abordar esta situación con urgencia, ahora y en el futuro", añadió Troedsson. "El sector de la salud y el sector alimentario tienen que trabajar juntos".

Establecer objetivos claros

"Conscientes de la enorme carga que supone para millones de personas y el desarrollo de sus países y de sus sociedades, la Unión Europea y la Comisión han situado la lucha contra la subalimentación en un lugar muy alto en la agenda del desarrollo", señaló Roberto Ridolfi, Director de Crecimiento y Desarrollo sostenible, (DG Desarrollo y Cooperación) de la Comisión Europea.

Ridolfi añadió que la UE está presionando para lograr "objetivos medibles y con plazos" para reducir el retraso del crecimiento infantil y otras consecuencias de la malnutrición, y que la Reunión técnica preparatoria podría desempeñar un papel crucial en establecer con claridad indicadores similares

Ridolfi alabó a los organizadores de la reunión y otros organismos internacionales como "aliados estratégicos a nivel mundial y nacional, para apoyar los esfuerzos de promoción de la nutrición".

Cerca de 300 expertos y representantes de los países se han reunido para la reunión preparatoria de Roma, junto a participantes de otros organismos de las Naciones Unidas y de organizaciones intergubernamentales, la sociedad civil, el sector privado, investigadores y asociaciones de consumidores.

La CIN-2 supondrá un seguimiento a la primera conferencia de este tipo que se celebró en 1992. Su objetivo es hacer un balance de los progresos realizados hasta ahora en la mejora de la nutrición y discutir cómo puede reforzarse la coordinación internacional para mejorar el impacto de las políticas y programas nacionales que influyen en la dieta y la salud. La CIN-2 servirá para amplificar el llamamiento del Secretario General de la ONU a los líderes reunidos en la Cumbre de Río+20 para asumir el "Desafío Hambre Cero ".

También se espera que la CIN-2 contribuya a establecer el rumbo de la agenda post-2015 de desarrollo y el enfoque de la EXPO 2015 en Milán, cuyo tema será "Alimentar el planeta, energía para la vida”.