Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

Conservar los bosques de la Amazonía a través de la implicación de las comunidades indígenas

Un proyecto en la Amazonía ecuatoriana potencia el desarrollo y aprovechamiento sostenible de los recursos por parte de las comunidades indígenas

INIAP Ecuador

Hacemos eco de un proyecto apoyado por el Instituto Nacional de Autónomo de Investigaciones Agropecuarias de Ecuador. Se trata de una iniciativa llevada a cabo por 32 mujeres de la comunidad kichwa de Campococha, en el Alto Napo. Esta pequeña comunidad de la Amazonía ecuatoriana es célebre por su oposición a los modelos de explotación coloniales o, dicho de otra forma, por saber defender lo suyo.

Un grupo de 32 mujeres de Campococha, provincia de Napo (Amazonía Ecutoriana), se han asociado para producir artesanías utilizando materiales provenientes de la reserva del bosque comunitario y, conjuntamente con la comunidad, trabajan en el mantenimiento de los viveros forestales. Esta labor se comparte con técnicos del Programa Nacional de Forestería del Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias, INIAP, con el fin de conservar y hacer un uso sostenible de estos recursos.

Mujeres de la comunidad Kichwa de Campococha

Mujeres de la comunidad Kichwa de Campococha

INIAP

32 mujeres de Campococha, comunidad Kichwa de la amazonía ecuatoriana, producen artesanía a partir de los recursos procedentes de su reserva comunitaria de 2400 ha. Una pequeña comunidad que es todo un símbolo contra el modelo colonial de explotación, aunque no contra el progreso: En su día no aceptaron las viandas de las petroleras pero sí que permitieron la construcción de una carretera.

En los viveros se tiene alrededor de 17.000 plantas de: Ahuano, Chuncho, Bálsamo, Tocota y Doncel que han sido priorizadas por la comunidad, señala el Ingeniero Paulo Barrera, técnico del Programa de Forestería del INIAP, y que sirven para ser sembradas en las chakras de los productores y también para programas de forestación de la provincia.

En esta comunidad se ha reforestado aproximadamente una 12 hectáreas, señala Barrera, además se han instalado 3 parcelas de investigación en la reserva que tiene la comunidad, con el fin de conocer la dinámica del bosque.

En estas parcelas se han identificado a los mejores árboles llamados plus para obtener semilla y luego producir plantas en el vivero. Se ha llevado a cabo estudios para identificar las especies que están en peligro de desaparecer para que la comunidad pueda conservarlas. También, dice Barrera, se ha utilizado sistemas de información geográfica para delimitar el área boscosa de la comunidad para que puedan acceder al Programa Socio Bosque, del Ministerio del Ambiente.

Estos trabajos que lleva a cabo el Programa Nacional de Forestería del INIAP, intentan contribuir a la preservación y uso sostenible de los territorios boscosos de comunidades kichwas como es el caso de Campococha y también de pequeñas propiedades de poblaciones mestizas del Alto Napo, mediante la ejecución de una forma diferente de usar la tierra, esto es, conservando los bosques a través de la puesta en valor de los recursos naturales.

Dentro de este contexto, la organización comunitaria es importante y da paso a diversas oportunidades y acciones de conservación y uso de los recursos genéticos forestales, como es el caso de las mujeres de la comunidad que trabajan artesanías utilizando semillas y fibras del bosque.