La industria española de panadería, bollería y pastelería certifica su Calidad
El certificado ISO 9001, la norma IFS y la BRC son habituales en los asociados de ASEMAC, destaca la asociación
La Asociación Española de la industria de Panadería, Bollería y Pastelería destaca en esta nota de prensa los Sistemas de Gestión de Calidad, nacionales e internacionales, a los que someten sus produccciones algunas de las empresas que conforman ASEMAC. Normas ISO 9001 y 14001, así como la específica para industria alimentaria IFS, además del protocolo de seguridad alimentaria BRC, entre otras
Cada vez los consumidores exigen que los productos que adquieren sean de mayor calidad y estén reconocidos por organismos acreditados. Hoy en día, empresas de todos los sectores se someten voluntariamente a estrictos controles para verificar la calidad en la elaboración de sus productos, gestión y servicios. Las compañías que conforman ASEMAC (Asociación Española de la industria de Panadería, Bollería y Pastelería) también apuestan por ofrecer productos de gran calidad a los consumidores. Actualmente, los asociados cumplen con varios Sistemas de Gestión de Calidad mediante diferentes certificados internacionales y nacionales. A través de un buen número de especificaciones técnicas se valoran una serie de actividades dentro de la empresa como son recursos, procedimientos, documentos, estructura organizacional y estrategias.
ASEMAC y sus modelos de certificación
Este valor añadido que son las normas de calidad para las empresas son emitidas por entidades certificadoras acreditadas por la ENAC (Entidad Nacional de Acreditación). Las certificaciones se pueden obtener según el objeto que se va a garantizar, es decir, producto, servicio, personas, empresas, gestión y procesos.
En cuanto a los sistemas de gestión de calidad, las empresas de ASEMAC apuestan por la reconocida certificación ISO 9001. Asociados como Berlys, Pastisart, Bellsolá, Ingapan y Panamar cuentan con la certificación de calidad ISO 9001. A través de esta norma, se asegura la calidad en la gestión de la compañía. Es una certificación internacional que promueve la adopción de un proceso basado en el desarrollo, implantación y mejora de la eficacia de un sistema de gestión. Además, Europastry cuenta con la norma ISO 14001, relacionada con un sistema de gestión ambiental. Con este certificado, la empresa se compromete a reducir los impactos medioambientales negativos de su actividad. En España, 2.380 empresas del sector alimentario disponen del certificado ISO 9001 y 791 de la normativa ISO 14001.
La ISO, con más de 60 años de vida, es una organización internacional compuesta por institutos de normas nacionales de 164 países. Según los últimos datos de ISO Survey publicados en diciembre de 2012, España cuenta con 53.057 certificados ISO 9001 emitidos en España en 2011. Estos números suponen un ligero descenso del número de empresas con este sello respecto al año anterior. La obtención de ellas supone un gran esfuerzo económico por parte de las empresas ya que para mantener los exigentes niveles de la norma hay que invertir en mantenimiento, ensayos sobre el producto, gasto en formación, etc. Las certificaciones son necesarias para poder exportar, una actividad cada día más común entre nuestras empresas.
Por otro lado, Pastisart, Forvasa, Ingapan, Europastry, Freshstart Bakeries, Panamar y Cobopa también poseen el certificado de seguridad alimentaria IFS (International Food Standard). La IFS es una norma específica para la industria alimentaria, que sólo se aplica a empresas que fabrican y envasan productos alimenticios. El objetivo de las empresas que poseen la IFS es implantar un esquema común para la seguridad de todos los productos propios de las cadenas de distribución europeas.
Además, empresas como Berlys, Ingapan, Atrian Bakers, Panamar, Cobopa y Europastry adoptan el protocolo de seguridad alimentaria BRC (British Retail Consortium). A través de este certificado se corrobora que las compañías alimentarias cuentan con unos determinados requisitos que garantizan la salubridad de sus productos.
Tanto la IFS como la BRC son normas específicas del sistema de gestión de calidad e higiene alimentaria. A través de ellas se controla que el producto final que llega al cliente cumpla con todas las exigencias de calidad y seguridad pertinentes.
Además, las empresas de Asemac complementan los anteriores certificados con otros sellos de calidad y seguridad alimentaria como son la AIB (American Institute of Baking) en el caso de Freshstart Bakeries. Este sello certifica que se cumplen unos requisitos de salubridad e inocuidad en el procesado y distribución de los productos que fabrica la compañía. Esta norma se inició en un principio para la industria panificadora. También Europastry y Fresh Start Bakeries disponen de otros certificados como la SQMS (Supplier Quality Management System: McDonalds), y Europastry WQA (Woolworths Quality Assurance Certification), OSHAS-18001 sobre seguridad laboral, HALAL sobre productos aptos para la comunidad islámica y RSPO (Roundtable on Sustainable Palm Oil).
En definitiva, ASEMAC promueve la diferenciación por calidad de los productos de sus asociados adaptándose a los nuevos requisitos y a las demandas de de la sociedad. Las empresas de ASEMAC están comprometidas con la calidad y seguridad alimentaria.
Las certificaciones de calidad, un valor añadido
Las normas de calidad que poseen las empresas que integran ASEMAC son voluntarias, pero con ellas se consigue legitimar la exquisita calidad de los productos que ofrecen. Los asociados, a través de estos certificados, planifican, controlan y mejoran todos los elementos que finalmente influirán en la satisfacción del cliente y en la obtención de los resultados deseados. La consecución de estos sellos muestra que los asociados de ASEMAC cumplen con unos estrictos requisitos de calidad que les otorgan mayor prestigio de cara a los consumidores, frente a sus clientes y también en la distribución.
Pero este proceso no acaba con la obtención del certificado. Las empresas de ASEMAC se someten periódicamente a evaluaciones y controles que supervisan que se sigan cumpliendo los requisitos de calidad establecidos en las normas.
La certificación es un proceso que realiza una entidad independiente mediante el que se evalúa el producto, gestión o servicio en base a determinados requisitos definidos en especificaciones técnicas. Estas características están determinadas por normas, que a su vez, son desarrolladas por Comités Técnicos de Normalización. Los Comités están compuestos por todos los agentes interesados en el producto, gestión o servicio, es decir, por la Administración, por los fabricantes, por los consumidores, etc. Ellos son los que establecen qué características técnicas de calidad debe cumplir un producto o proceso para conseguir el certificado.