Confecarne: "Industria cárnica apoya las investigaciones para detectar origen de carne de caballo"
La patronal del sector cárnico español asegura que este fraude ha visto la luz "por el adecuado funcionamiento de los sistemas de control y trazabilidad" y los sistemas de autocontrol de las empresas
La Confederación de Organizaciones empresariales del Sector Cárnico de España muestra su apoyo al esclarecimiento del fraude de la carne de caballo. Piden además "que se depuren todas las responsabilidades". Aseguran que este fraude, que siguen considerando como supuesto, "ha sido puesto de manifiesto por el adecuado funcionamiento de los sistemas de control y trazabilidad de la cadena alimenta"
La Confederación de Organizaciones empresariales del Sector Cárnico de España (CONFECARNE) apoya incondicionalmente las pruebas e investigaciones que han puesto en marcha las autoridades comunitarias y las Administraciones españolas para restaurar la confianza de los consumidores y depurar en su caso las responsabilidades correspondientes en relación con la aparición de carne de equino en productos procesados de carne de vacuno en varios países europeos, incluida España.
Aunque este incidente no entraña ningún riesgo para la salud por el consumo de estos productos sino únicamente de etiquetado incorrecto, es inaceptable para la industria cárnica que ningún operador deshonesto empañe la reputación y esfuerzos de todo un sector para poner a disposición del consumidor productos seguros, de calidad y totalmente conformes a la normativa europea y española.
Precisamente el supuesto fraude ha sido puesto de manifiesto por el adecuado funcionamiento de los sistemas de control y trazabilidad de la cadena alimentaria, así como los sistemas de autocontrol establecidos por las propias empresas fabricantes, para detectar los lotes irregulares y retirarlos inmediatamente del mercado, y permitirá investigar el origen y responsabilidades de esta actuación irregular.
Además de los análisis puestos en marcha por la comisión Europea la pasada semana, se están realizando autocontroles adicionales en las industrias -incluyendo análisis de laboratorio regulares mediante “PCR”- y desde las organizaciones sectoriales se ha instado las empresas a trabajar conjuntamente con sus proveedores para reforzar los controles en las cadenas de suministro para proteger la autenticidad de las carnes y demás ingredientes utilizados en la elaboración de los productos, y consecuentemente, los derechos de los consumidores.
Se está investigando para saber si esta materia prima irregular procede del mismo origen que la encontrada en Irlanda, Francia y otros países, ya que ninguna de las empresas involucradas había adquirido, utilizado ni procesado carne de caballo. Por ello, esto hace considerar que el origen de esta contaminación pudo estar en un lote o lotes de carne de vacuno congelada mal manipulados con trazas de ADN equino, por contacto entre las carnes o por mezcla de éstas en su manipulación en fresco.
Las empresas y organizaciones del sector lamentan profundamente esta circunstancia, que perjudica seriamente la imagen de una industria cárnica que trabaja de forma responsable para comercializar únicamente productos seguros y de calidad, mediante la mejora continua de los procesos de producción, los controles, la selección de proveedores y la seguridad de las materias primas, en cumplimiento de la exigente legislación nacional y comunitaria sobre esta materia, junto a los protocolos de autocontrol y seguridad puestos en marcha por las propias empresas, pero que no pueden prevenir un incidente imprevisto como éste, por mala manipulación o por intencionalidad de un operador concreto.
Por ello, el sector es el primer interesado en que se detecte, investigue y corrija con eficacia cualquier posible error o actuación fraudulenta en la cadena de producción y comercialización de las carnes y sus productos derivados para restaurar la confianza de los consumidores.