Los ganaderos de Ronda sufren la pérdida de cientos de crías por el temporal
La lluvia acapara las noticias locales desde hace dos meses
El técnico de ASAJA Málaga en Ronda, muchos de nuestros ganaderos han visto cómo hasta el 50% de las crías de algunas explotaciones no han sido capaces de sortear las inclemencias del tiempo. En una comarca mucho más fría que el resto de la provincia, el sector ovino-caprino está resultado seriamente afectado: "En algunas fincas la mortandad es de hasta el 70%", matiza el técnico de ASAJA.
La lluvia acapara las noticias locales desde hace dos meses. En la calle, el tiempo se ha convertido en un tema recurrente. Y en el campo, los agricultores y ganaderos comparten y comparan cabañuelas y se aventuran a predecir los vaivenes de las precipitaciones en los próximos días. Entre tanto, se especula acerca de cómo afectan estos días lluviosos y grises al carácter malagueño, más acostumbrado al clima cálido y soleado. Y si en las personas el temporal cala en el ánimo, en los animales, las lluvias y el frío dejan daños muchos mayores. Así lo están constatando los ganaderos de la Serranía de Ronda, que ven como muchas de las crías que están naciendo estos días apenas sobreviven unas horas.
Según Rafael Cordero, técnico de ASAJA Málaga en Ronda, muchos de nuestros ganaderos han visto cómo hasta el 50% de las crías de algunas explotaciones no han sido capaces de sortear las inclemencias del tiempo. En una comarca mucho más fría que el resto de la provincia, el sector ovino-caprino está resultado seriamente afectado: "En algunas fincas la mortandad es de hasta el 70%", matiza el técnico de la asociación agraria.
Algunos animales adultos también han perecido a causa del temporal, aunque en estos casos el porcentaje se reduce al 10%. El número de cabezas que se han perdido en estos días es difícil de cuantificar, porque depende de las características de las explotaciones y de los posibles resguardos que estas tengan. "Pero el daño ha sido importante, cada día vienen ganaderos hasta nuestras oficinas contándonos nuevos casos", relata Cordero al tiempo que manifiesta que la cabaña de vacas nodrizas también está acusando unas bajas que oscilan entre el 8 y el 10%, según la ubicación de la explotación.
Estas muertes tienen además un coste económico difícil de soportar teniendo en cuenta la crisis tan aguda que padece el sector desde meses atrás. Se calcula, grosso modo, que el precio de un chivo ronda entre 30 y 50euros; un ternero, entre 250 y 300 euros; y una vaca nodriza, entre 600 y 900 euros.
A las muertes, los ganaderos tienen que sumar en sus cuentas de gastos el pienso con el que todo este tiempo están alimentando a la cabaña ganadera, ya que el campo está impracticable y los animales no pueden pastar libremente. En cualquier caso, Carlos Carreira, veterinario de ASAJA Málaga, calma los ánimos y recuerda que el importe que ahora están invirtiendo será un dinero que previsiblemente se ahorrarán la próxima primavera: "Si normalmente el pasto se acaba otros años en mayo, este año podrán estar pastando hasta julio".