Denuncian un aumento de robos de ganado en varias comarcas valencianas
La Unió alerta sobre los efectos que pueden tener estos robos en unos sectores, caprino y ovino, tremendamente afectados por la Crisis
La Unió de Llauradors i Ramaders denuncia el aumento de robos de ganado en las comarcas valencianas del Camp de Túria y la Serranía, fundamentalmente a productores de ovejas y corderos, "que viven ya una tremenda crisis durante los últimos años y un creciente abandono". Un ejemplo es lo ocurrido el pasado sábado en Vilamarxant: robaron 13 ovejas jóvenes y las mataron en una caseta de la zona
Los robos de animales son continuos y el pasado sábado se llevaron 13 ovejas jóvenes de una explotación situada en Vilamarxant que fueron matadas en una caseta próxima a la misma. El problema es que, tal y como sucede habitualmente, no es la primera ocasión que le roban a ese ganadero. Presentó la correspondiente denuncia ante el cuartel de Vilamarxant pero no confía demasiado en su resultado, pues de los anteriores robos no tiene noticias al respecto.
LA UNIÓ reclama mayor vigilancia en las zonas rurales para evitar este tipo de robos y vuelve a insistir en la necesidad de cambiar el actual Código Penal y, con ello, la tipificación de los delitos en el sector agrario y que dejen de considerarse como mera falta de hurto el robo de animales o cosechas aquello cuyo valor no supera los 400 euros. Además, a juicio de LA UNIÓ, es necesario castigar la reincidencia en el campo porque ahora un ladrón puede cometer en el plazo de un año hasta cuatro robos y ser tipificado sólo como una falta dejando por tanto totalmente indefenso al ganadero.
Los productores de ovino y caprino atraviesan por una crítica situación al percibir precios muy bajos y pagar costes muy altos. El descenso en la demanda de la carne de cordero debido al retroceso en el consumo y a la crisis económica en general, junto a un aumento de las importaciones y de los costes de producción, ha hundido a un sector importante para las zonas desfavorecidas y de interior donde existen desafortunadamente escasas alternativas de viabilidad económica.
Realizan una importante labor social, económica y ecológica para las zonas más desfavorecidas. Ayuda a la fijación de la población rural y al mantenimiento de determinados ecosistemas mediante el aprovechamiento de pastos en zonas de difícil situación geográfica y de recursos escasos, revalorizando grandes áreas y contribuyendo al equilibrio medioambiental de éstas.
LA UNIÓ alerta de que los robos, junto a la crisis de precios que padecen, puede ser uno de los principales para hacer desaparecer la figura de los pastores de la geografía de la Comunitat Valenciana.