Unió de Pagesos reclama la lucha contra la especulación y el control de la gran distribución
Durante la jornada de clausura de su XI Congreso, celebrado este fin de semana en Girona
Los casi 150 delegados que han participado en el XI Congreso de Unió de Pagesos aprobaron ayer por una amplia mayoría el informe sindical y las ponencias de Política agraria y Organización del campesinado en relación al funcionamiento del mercado, así como la de estatutos , que deben orientar la actuación y organización del sindicato agrario catalán durante los próximos cuatro años.
El XI Congreso de Unió de Pagesos también elegía ayer domingo a la nueva Comisión Permanente Nacional, que está formada por Antoni Aresté (Segrià), Francesc Bancells (Barcelona), Joan Caball (Alt Empordà), Josep Maria Coll (Alt Camp) , Josep Maria Companys (Segrià), Josep Cuscó (Barcelona), Josep Z. Ferré (Tarragona), Xavier Frigola (Alt Empordà), Francisco Javier Jiménez (Cerdanya), Carlos Mencos (Barcelona), Joan Montesó (Baix Ebre) y Josep Carles Vicente (Priorat). De éstos, Caball, Coll, Cuscó, Montesó y Vicente ya estaban a la Comisión Permanente anterior. Joan Caball también ha sido elegido portavoz de la nueva Permanente. Las próximas semanas la nueva Comisión Permanente distribuirá las responsabilidades entre sus miembros y propondrá el nuevo coordinador nacional, que será ratificado por el Consejo Nacional del sindicato.
El Congreso del sindicato finalizaba insistiendo en que seguirán denunciando el fraude en la comercialización agraria y recordando "la especulación constante y el control cada día más estrecho de la gran distribución". Además, se pidió la formación de la población desde la escuela en materia de alimentación, así como la coordinación de las estrategias con organizaciones del campesinado europeas y del resto del mundo para luchar contra las amenazas globales. Estas cuestiones se recogen en la Declaración de Girona, documento aprobado por el XI Congreso del sindicato.
Unió de Pagesos también reitera en esta declaración su convicción de persistir en "el trabajo de cultivar la tierra y cuidar de las granjas", así como de insistir en el arraigo en el territorio, contar con explotaciones agrarias con capacidad sucesoria o "construir canales de comercialización honestos, creíbles y prestigiosos en cuanto a la calidad y excelencia de las producciones". Además, el sindicato reitera la necesidad de "cobrar lo justo por nuestro trabajo" y de tener "justicia en las relaciones comerciales", concretamente en cuanto a "la identificación de los productos que son de la Unión Europea en los puntos de venta", y que se cumplan todas las normas de comercialización y etiquetado a lo largo de la cadena de distribución.