CCOO se sitúa como primera fuerza sindical en las empresas del sector agrícola español
Este sindicato logra hacerse con el 46,98% de los representantes sindicales en las empresas del sector
El sindicato Comisiones Obreras ha alcanzado el 46,98% de los representantes sindicales elegidos en las empresas del sector agrícola español, tras finalizar el pasado 31 de diciembre el período de mayor actividad en el proceso de renovación de representantes sindicales de los trabajadores por cuenta ajena.
La Federación Agroalimentaria de CCOO se sitúa como primera fuerza sindical del sector agrario en España en el proceso de Elecciones Sindicales en las empresas del sector cuyo período álgido (*) de renovación de los representantes sindicales finalizó el pasado 31 de Diciembre de 2011.
En el proceso de renovación de mandato de los representantes sindicales (delegados/as sindicales y comités de empresas) que se han estado desarrollando en su período álgido hasta el pasado 31 de Diciembre de 2011.
La Federación Agroalimentaria de CCOO se ha convertido en la primera fuerza sindical en el sector en el número de representantes sindicales elegidos democráticamente por los trabajadores y trabajadoras en las empresas de más de 6 trabajadores/as del sector agrario.
CCOO ha obtenido en el computó dinámico 2089 representantes sindicales, el 46,98% del total de los 4447 representantes elegidos en las diferentes empresas del sector agrario, mientras que la segunda fuerza sindical ha obtenido 1950 representantes lo que representa el 43,85% del total de representes a elegir.
CCOO supera a fecha 31 de Diciembre de 2011 en 139 delegados/as a la segunda fuerza sindical lo significa superar a la segunda fuerza sindical en el 3,13%.
Este importante avance sindical de CCOO en las elecciones sindicales en el sector primario de nuestro país significa un respaldo sindical a trabajo de miles de delegados/as de CCOO que optan por el proyecto sindical de CCOO para la defensa de sus intereses en las empresas agrarias de nuestro país.
(*) Nota: entiéndase "álgido" en el sentido contrario a su significado real (momento más bajo de un período febril), una paradoja ligüística sorprendentemente aceptada por la RAE.