El cambio climático agravará los desastres naturales en países en vías de desarrollo
Según revela un informa presentado por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU
El Panel Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU presentó este pasado viernes en Uganda, a través de su director Rajendra Pachauri, un informe especial que advierte de los riesgos por eventos climáticos extremos (sequías, inundaciones, etc.) que sufrirán los países en desarrollo durante el siglo XXI a consecuencia del cambio climático antropogénico.
"Este informe no trata sobre mitigación", decía este pasado viernes, 18 de noviembre, Rajendra Pachauri, director del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) durante la presentación en Kampala (Uganda), del Informe especial sobre la Gestión de riesgos de fenómenos extremos y desastres para fomentar la adaptación al cambio climático. Según Pachauri, este es un documento "extremadamente relevante" para afrontar las consecuencias del cambio climático en el siglo XXI, en particular para países en vías de desarrollo, especialmente vulnerables a eventos extremos como sequías, inundaciones y olas de calor.
No son necesarios eventos extremos para causar daños en países en vías de desarrollo
Los datos científicos del informe son, para el indio, "robustos y equilibrados", y proporcionan una mirada a las proyecciones del futuro y una herramienta para facilitar la adaptación a los impactos del calentamiento global, impactos "que se intensificarán en el siglo XXI", afirmó Pachauri.
Nick Nuttall, portavoz del IPCC, alertaba que "no son necesarios eventos extremos" para causar daño en países en vías de desarrollo, y puso como ejemplo la epidemia de cólera que tuvo lugar en Zimbabue (2008) justo después del comienzo de la temporada de lluvias y las inundaciones del año pasado en Pakistán.
Los desastres naturales y la política
Como los expertos han advertido, entre 1970 y 2008, un 95% de los desastres naturales han ocurrido en países en desarrollo, cifra que esperan aumente durante este siglo. Thomas Stocker, de la Universidad de Berna y copresidente del Grupo de Trabajo 1 del IPCC –el encargado de reunir toda la información científica– afirmó que "es probable que la frecuencia de días cálidos aumente en un factor de 10 en la mayoría de las regiones del mundo. Las precipitaciones intensas serán también más frecuentes, y en los ciclones tropicales la velocidad del viento aumentará, mientras que su número se mantendrá probablemente constante o disminuirá".
Los eventos extremos son, para Chris Fields, director del Grupo de Trabajo 2 del IPCC –encargado de transformar la evidencia científica en políticas concretas– "los fenómenos más complejos de entender, simular y predecir. Ocurren en todas las regiones y deberían ser tenidos en cuenta por los políticos".
Para el climatólogo argentino Vicente Barros, también presente el viernes en Kampala, el informe representa el fruto del trabajo de dos comunidades, "los expertos en cambio climático y los expertos en manejo de desastres" y abogó por la necesidad de facilitar la integración de ambas políticas y "elaborar un mensaje coordinado".
El Informe especial fue una iniciativa propuesta por Noruega en la cumbre del IPCC de 2008, en Ginebra. Ha supuesto un trabajo de más de dos años y medio donde han colaborado más de un centenar de científicos y legisladores. Para Qin Dahe, de la Administración Meteorológica China, el informe tendrá gran utilidad para "incrementar la resistencia al cambio climático y la capacidad de la comunidad" de los países en desarrollo.