Andalucía apuesta por las vacunaciones masivas contra la Lengua Azul
Clara Aguilera considera que "es la mejor opción" tras haberse detectado contagios en Cádiz
La Consejera de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Clara Aguilera, informó ayer en el Parlamento regional que se continuará con el programa de vacunaciones masivas contra la enfermedad de la Lengua Azul, tras haberse detectado la presencia del serotipo 4 en la provincia de Cádiz durante los controles habituales.
La consejera de Agricultura, Clara Aguilera, informaba ayer en el Parlamento que se continuará con el programa de vacunaciones masivas, tras detectarse la presencia del serotipo 4 de la Lengua Azul, en "explotaciones centinela" ubicadas en la provincia de Cádiz. Aguilera destacó las vacunaciones en masa como la mejor opción contra esta enfermedad y la mejor forma de evitar pérdidas económicas a los productores.
La consejera hizo especial hincapié en el éxito del Plan de Vigilancia Epidemiológica que se viene aplicando para la detección precoz de los tres serotipos del virus de la Lengua Azul (el 1 y el 4, procedentes del norte de África, y el 8, de Europa). Así, destacaba que gracias a medidas como la existencia de explotaciones de animales centinelas -animales que de forma intencionada no están vacunados para detectar el nivel de presencia del virus-, ubicadas estratégicamente en las rutas de entrada de la enfermedad desde África, ha sido posible determinar con anticipación el nivel de presencia del virus que causa esta enfermedad.
Además del programa de vacunación frente al serotipo 4 de la Lengua Azul para evitar su propagación y disminuir el riesgo de contagio, que se viene realizando en las provincias de Cádiz, Huelva, Málaga y en los municipios sevillanos de Utrera, Osuna, Lebrija, Sanlúcar la Mayor y Marchena, Aguilera también destacó medidas de vigilancia entomológica, como la instalación de trampas para la captura de insectos vectores o transmisores de esta enfermedad -generalmente, mosquitos-, con objeto de conocer el nivel de riesgo y, de este modo, activar las medidas que se consideren más oportunas en cada momento para mantener la enfermedad bajo control.