La Unió denuncia la indefensión de los agricultores y ganaderos ante los continuos robos en el campo
Comunicado de la Unió en el que expresa su indignación ante el caso de un agricultor
Un agricultor de Aielo de Rugat pasa de ser robado durante varios días a ser posteriormente acusado y condenado a pagar. LA UNIÓ cree injusto y aberrante que al agricultor afectado se le criminalice y al ladrón poco menos que se le premie.
LA UNIÓ de Llauradors i Ramaders denuncia la total indefensión en la que se encuentran los agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana ante los continuos robos que se producen en sus explotaciones agropecuarias.
Los agricultores y ganaderos valencianos observan estupefactos como la justicia en lugar de proteger a aquellos que ven mermada su renta con los robos que se cometen en sus explotaciones, al final beneficia -o al menos deja indemnes- a los infractores que cometen los hurtos.
La familia del agricultor Vicente Tormo en la localidad de Aielo de Rugat (Vall d’Albaida) es una de las últimas afectadas y verse impotentes por los robos. Tras una semana de continuos robos en el campo de melocotones que estaban recolectando, el pasado 21 de agosto uno de sus hijos que venía de cazar sorprendió en el bancal al presunto ladrón con las manos en la masa.
Le amenazó con la escopeta sin utilizarla en ningún momento -el ladrón también llevaba otra-, le instó a marcharse y se trasladó al cuartel de la Guardia Civil de Castelló de Rugat a presentar denuncia por los robos con las dos escopetas. Su sorpresa fue mayúscula porque el ladrón de melocotones estaba allí también para presentar denuncia por amenazas. Poco después la Guardia Civil de Castelló de Rugat se presentó en su casa para detenerlo mientras el ladrón permanecía tranquilamente en libertad. Todo el día lo pasó de un lado para otro entre cuarteles y juzgados como un criminal, por Castelló de Rugat, Gandia y Ontinyent, donde finalmente la jueza lo dejó en libertad y ordenó un juicio rápido que se celebró el pasado 25 de agosto.
Con objeto de evitar que hubiera antecedentes penales para el agricultor afectado pues era una palabra contra la otra, la solución final fue un acuerdo que se plasmó en el pago de una multa de 160 euros más un tercio del coste del juicio para el agricultor y sólo 240 euros de multa más un tercio del coste del juicio para el ladrón. La diferencia es de 80 euros, sin contar además la sensación de indefensión y el evidente nerviosismo que les ha ocasionado el hecho a esta familia valenciana de agricultores. Días más tarde del juicio, Vicente Tormo sorprendió de nuevo a otro ladrón hurtando en su campo de melocotones, pero claro ya no se atrevió a amenazarle. Ver para creer: de agricultor afectado a acusado e imputado.
Para más información: Vicente Tormo, Afiliado de LA UNIÓ de Aielo de Rugat (680 25 89 15)