El índice de precios de los alimentos de la FAO subió durante el mes de junio

La organización agraria atribuye la crisis de precios a la presión de la gran distribución
LA UNIÓ de Llauradors denuncia que continúa el hundimiento de los precios del aceite de oliva en origen, ya que durante esta campaña se sigue vendiendo por bajo los costes de producción. Este hecho supone unas pérdidas de 800 euros por hectárea para el productor por segundo año consecutivo.
LA UNIÓ de Llauradors denuncia que continúa el hundimiento de los precios del aceite de oliva en origen, ya que durante esta campaña se sigue vendiendo por bajo los costes de producción. Este hecho supone unas pérdidas de 800 euros por hectárea para el productor por segundo año consecutivo. Esta campaña el precio ha caído, con respecto a la medio de las campañas que van de 2005-2006 a 2007-2008, el 35% para el aceite de oliva virgen extra, el 32% para el aceite de oliva virgen y el 33% para el aceite de oliva refinado.
LA UNIÓ reitera que ésta crisis de precios se debe a la presión que ejerce la gran distribución a la hora de fijar el precio, ya que en el conjunto del Estado español, la distribución comercial organizada cuenta con una cuota de mercado del 86% del total de las ventas en el caso del aceite de oliva, y del 88% en el caso del aceite de oliva virgen extra. Además, en todo el Estado, un 57% del aceite de oliva y un 44% del aceite de oliva extra virgen se venden bajo marca blanca, según datos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.
Desde LA UNIÓ se reclama al Gobierno central y al autonómico que establezcan, de una vez por todas, políticas eficaces en este sector estratégico para las zonas de interior de la Comunitat Valenciana, tanto desde el punto de vista económico, como social, medio ambiental y paisajístico. Entre las propuestas que desde LA UNIÓ se hace llegar a la administración agraria cabe destacar las siguientes:
