Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

Sólo el 5% de las agricultoras y ganaderas llegan a la edad de jubilación con 35 años cotizados

El Área de la Mujer de COAG con motivo del Día internacional de la mujer y el acuerdo para la reforma de las pensiones

COAG

La ampliación del cálculo de los años cotizados aboca a la mayoría de las mujeres del campo a jubilarse con menos de 500 euros de pensión. Los esfuerzos por conseguir la ansiada titularidad compartida de las explotaciones agrarias caerán en saco roto porque no servirán para alcanzar una equiparación real de derechos sociales.

Mujeres recogiendo fresas

Con motivo del día internacional de la Mujer ( 8 de marzo), el Área de la Mujer de COAG denuncia que tan sólo el 5% de las agricultoras y ganaderas llegan a la edad de jubilación con 35 años cotizados y 1 de cada 3 no supera los 15 años. Desde esta organización se quiere poner de relieve que la situación que plantea el anteproyecto del "Acuerdo para la Reforma de las Pensiones" no va a fomentar la incorporación de las mujeres a las explotaciones agrarias ni tampoco el cambio del modelo subsidiario actual de "familiar colaborador" a un modelo de derechos propios como sería la titularidad compartida. De las 400.000 mujeres que a día de hoy se consideran "familiar colaborador" un alto porcentaje son mayores de 42 años y por tanto no cumplirían con los 25 años necesarios para hacer un cálculo para una pensión digna y superar la pensión mínima contributiva.

"La situación de bajo periodo de cotización que reunimos la mayoría de mujeres tiene su verdadera causa en un modelo socioeconómico de desigualdad e incompatibilidad entre empleo y cuidados. Además, En el medio rural y en las labores agrarias las mujeres nos vemos sometidas a un desgaste físico enorme e invisible ante las instituciones, ante la sociedad y ante nuestros propios compañeros avalado por la ausencia de informes con impacto de género sobre riesgos y enfermedades laborales", ha apuntado Belén Verdugo, responsable del Área de la Mujer de COAG y ante esta situación se pregunta: "¿ En qué condiciones de salud nos vamos a encontrar las agricultoras y ganaderas a los 67 años de edad habiendo cuidado de nuestros hijos y nuestros padres además de haber trabajado en el campo?".

Asimismo, desde esta organización se quieren subrayar que la mayor esperanza de vida de las mujeres (el 58% de los mayores de 65 años son mujeres) no es directamente proporcional a la calidad de vida en la vejez. "Los responsables políticos no está valorando que con posterioridad el Estado va a tener que destinar para nosotras mucho más presupuesto que los que ahora se está ahorrando con la reforma del sistema de pensiones", ha señalado Verdugo.

Desde COAG se ha elaborado un documento de alegaciones a la reforma de las pensiones que se ha enviado a los diferentes grupos políticos con representanción en el Congreso y se ha presentado en el Consejo Económico y Social (CES) para que se tenga en cuenta a la hora de elaborar el dictamen. En el mismo se reclama el mantenimiento de los 65 años como edad legal de jubilación de los agricultores/as y ganaderos/as dado el carácter penoso, duro y de gran exigencia física del trabajo en la actividad agraria que provocan un deterioro físico superior a otros muchos sectores laborales, y se rechaza la ampliación del período de cálculo de los años de cotización (por lo anteriormente comentado). En este sentido, el Área de la Mujer de COAG considera necesario este sector tenga la consideración de excepcional, protegido o duro por su actividad y por las condiciones del trabajo, a fin de no variar los conceptos existentes de pensión de jubilación.

También la Confederación de Asociaciones de Mujeres del Medio Rural CERES, vinculada a COAG, ha firmado un manifiesto contra la reforma de las pensiones junto a más de 90 asociaciones de mujeres del Estado que han entregado y debatido con todos los grupos que forman parte de la comisión del Pacto de Toledo.

Elecciones Autonómicas y Municipales 2011

El Área de la Mujer y la Confederación de Mujeres Rurales (CERES) ha contribuido en el análisis de las políticas municipales de igualdad en unas jornadas estatales que tuvieron lugar los 25 y 26 de febrero organizadas por COMPI (Coordinadora de organizaciones de mujeres para la participación y la igualdad) de la que se ha obtenido mucha información sobre la situación en la que han quedado las mujeres a raíz de la Ley 3/2007 de Igualdad. En ella hemos propuesto que se trasladen a todos los partidos políticos que opten a las alcaldías nuestras principales inquietudes haciendo una vez más muestra de la ciudadanía activa que tenemos las mujeres en el ámbito asociativo. Entre otras: un buen sistema de asistencia en servicios sociales, así como asistencia integral para mujeres víctimas de los malos tratos en el medio rural, con personal cualificado y asistencia sanitaria integral para las mujeres. Todas estas reivindicaciones comenzarían con la solicitud de una paridad en listas electorales más allá de los municipios por encima de los 3.000 habitantes, puesto que en el resto de localidades las mujeres nos seguimos viendo inmersas en un mundo patriarcal y machista.