Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

Las tres principales organizaciones agrarias de Galicia han conseguido con esta primera jornada de reivindicaciones trasladar al conjunto de la ciudadanía la problemática de unos precios en origen "que no sólo es de 13.000 familias, sino que es un problema de toda la sociedad", según expresaba ante los medios de comunicación Javier Iglesias, portavoz de Unións Agrarias . La sección regional de UPA es una de las convocantes de estos actos de boicot y protesta, junto a Xóvenes Agricultores (ASAJA) y el Sindicato Labrego, este último ligado a la estatal COAG.

No es casualidad que Lactalis haya sido el primer objetivo de las reivindicaciones de esta versión gallega de la Alianza por la Unidad del Campo. Los ganaderos culpan a la multinacional francesa de bloquear la subida de los precios en origen de la leche, junto a las empresas gallegas Río y Celta.

Durante la mañana de ayer un millar de ganaderos se concentró frente a las puertas de la factoría que Lactalis tiene en Vilalba. Por la tarde continuaron los actos de reivindicación, desplazándose las protestas a varias superficies comerciales, tanto en esta misma localidad lucense como en A Coruña.

Actualmente el precio medio en origen por litro de leche en España es de 0,29 €, mientras que los costes de producción ascienden a una media de 0,37 €

En esta segunda parte de la jornada reivindicativa de ayer, grupos organizados de ganaderos se dedicaron a identificar y marcar los productos de las tres firmas comerciales antes citadas, buscando así la implicación de los consumidores a través del reconocimiento de una problemática de la que, según los convocantes, tienen buena culpa esta tres empresas, las mismas que pagan los precios más bajos por la leche.

Según los últimos datos aportados a nuestro medio por parte de la Confederación de Productores Lácteos (FLEPAC, Ganaderos Unidos y PROLEC) , los ganaderos gallegos son los que actualmente perciben los precios más bajos por la leche en el conjunto del Estado, junto a sus colegas de Castilla y León y sólo "superados" por los de la comunidad de Madrid. Pese a los acuerdos alcanzados el pasado año, la situación del sector lácteo en España es muy preocupante: actualmente el precio medio en origen por litro de leche en España es de 0,29 €, mientras que los costes de producción ascienden a una media de 0,37 €, citando a la misma fuente.

Nos encontraríamos por tanto ante una situación prácticamente insostenible por parte de los productores, sin duda el eslabón más débil de la cadena láctea, que se encontrarían actualmente produciendo a pérdidas. Estas cifras sitúan a nuestros ganaderos no sólo por debajo de la media de la Unión Europea, también de los precios internacionales.

Un claro exponente de esta alarmante desviación de la normalidad en el mercado lácteo español lo encontramos en lo acontecido durante el pasado mes de junio. Según los datos aportados por EUROSTAT y la propia Comisión Europea, mientras que los precios en origen de la leche protagonizaron un importante aumento en el conjunto de la Unión, un 5% sobre el mes anterior y hasta un 20% respecto al mismo período del año 2009, en nuestro país se volvió a registrar un nuevo descenso en los precios, que se situaron en ese mes hasta un 3,6% por debajo de la media europea y hasta un 4% respecto a Francia .

Resulta lógico que los ganaderos se fijen en el modelo galo: tras el acuerdo alcanzado en el seno de la interprofesional láctea entre productores, cooperativas e industrias en el mes de agosto, los precios en Francia han registrado en dicho mes un nuevo repunte de casi el 6% respecto al mes anterior. Casualmente éste es el país originario de la multinacional Lactalis, algo que no puede sino levantar más suspicacias por parte de nuestros productores.

Ayer fue Lactalis el objetivo directo de las protestas ganaderas aunque, como afirmaba ante los medios allí desplazados Carme Freire Cruces, Secretaria General de Sindicato Labrego, durante los próximos días estas protestas se reproducirán frente a las factorías de Río y de Celta.

Y han cumplido. Desde la mañana de hoy jueves se ha reproducido la concentración frente a la factoría de Lactalis, con más contundencia, además de en la fábrica de Leche Río en Lugo y en Lactogal, situada esta última en la localidad coruñesa de Pontedeume y perteneciente al grupo Leche Celta. Los ganaderos mantienen cerradas estas factorías, de las que no podrá salir ningún camión al menos hasta mañana por la noche. Especialmente tenso está resultando ser el pulso con Jesús Lence, el empresario gallego propietario del Grupo Río. Los ganaderos le critican precisamente por eso, por ser gallego: "a donde irá a comprar la leche", se preguntaba hoy Juan Pérez, portavoz de Xóvenes Agricultores.

Los responsables de las organizaciones agrarias avisan de de que si productores e industrias no llegan a un acuerdo hoy en la reunión de la Interprofesional Láctea o el martes en la Mesa do Leite –de ámbito autonómico-, las protestas continuarán de forma indefinida.

Además de mantener cerrado el tránsito en dichas fábricas, las movilizaciones han vuelto a dirigirse hacia los puntos de venta y los consumidores, esta vez en centros comerciales de Lugo (Carrefour) y Ferrol (Alcampo).

La secretaria general del SLG ha reafirmado lo que ya mantenía en sus declaraciones de ayer. Carmen Freire ha declarado que "su demanda es muy clara". Los ganaderos gallegos quieren cobrar por la leche un precio justo que cubra los costes de producción. En este sentido los manifestantes afirman que lo único que piden es que se cumpla el acuerdo alcanzado el pasado año: Aplicar un precio de referencia para la leche de acuerdo con la evolución del mercado en Francia.

De no conseguir dichas aspiraciones, las organizaciones agrarias convocantes advierten que estas tres jornadas de movilizaciones no serían más que "el inicio de un boicot permanente en el consumo".