Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

E-pasto: Un nuevo proyecto TIC para ayudar a los pastores pirenaicos

Con esta iniciativa que utilizará collares para la geolocalización se pretende evitar la colocación de vallas para controlar a los animales

IRTA

El proyecto piloto E-pasto, enmarcado en la iniciativa europea AGRIPIR, pretende poner en marcha un "pastor virtual" capaz de controlar los rebaños piernaicos a distancia. Para ello emplearán collares dotados de dispositivos de geolocalización, que permitirán al ganadero conocer en todo momento la ubicación exacta de sus vacas, ovejas o caballos

E-pasto: Un nuevo proyecto TIC para ayudar a los pastores pirenaicos

Tradicionalmente, los pastores pirenaicos trasladaban a sus rebaños a los pastos de montaña entre mayo y septiembre, y permanecían en sus cabañas durante toda la temporada estival con la única compañía de sus animales. En la actualidad, el pastoreo se ha modernizado en muchos de sus aspectos, pero la permanencia de las reses en el monte sigue planteando problemas, sobre todo en cuanto a examen veterinario y control de los desplazamientos del ganado.

Como en casi todos los aspectos de la vida, las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) pueden suponer una auténtica revolución en la actividad agroganadera. Uno de los ejemplos más recientes es el proyecto piloto e-Pasto, que se va a desarrollar en el Pirineo. Enmarcado en el proyecto europeo AGRIPIR (cofinanciado por FEDER en el marco de POCTEFA), que reúne a socios vascos, franceses y catalanes en una iniciativa de cooperación transfronteriza, se trata de una iniciativa original e innovadora, consistente en poner en marcha un “pastor virtual” que controle a los rebaños a distancia, desde la pantalla de un ordenador o de dispositivos portátiles (tablets, por ejemplo).

Vacada en zona pirenaica con collares geolocalizadores

Vacada en zona pirenaica con collares geolocalizadores

AGRIPIR

Por medio de un collar emisor-receptor dotado de un sistema de geolocalización por satélite, será posible conocer a distancia la ubicación en tiempo real de cada res en el monte, ya se trata de vacas, ovejas o caballos. El sistema será capaz también de controlar su estado de salud y podrá detectar si la res está pastando o no y si se desplaza en un momento determinado. Y, lo que es más importante, este “pastor virtual” será también capaz de interaccionar con la manada para dirigirla a la zona deseada, por medio de señales como sonidos, vibraciones o impulsos eléctricos.

De esta forma, con la puesta en marcha de e-Pasto se evitará la necesidad de instalar vallas físicas para controlar los rebaños, contribuyendo a preservar el paisaje pirenaico. Este proyecto piloto de “vallas virtuales” acaba de ponerse en marcha en su primera fase experimental en los pastos de montaña de Prat d’Albis (Departamento de Ariège, en la región francesa de Midi-Pyrénées), y el próximo año se trasladará en su segunda fase a la comarca guipuzcoana de Urola-Erdia. El área elegida para esta primera fase experimental tiene una superficie de 2.000 hectáreas, a una altitud de entre 900 y 1.600 metros, y acoge en el período estival a más de 1.000 cabezas de ganado ovino, cerca de 600 de bovino y 65 equinos, pertenecientes a una agrupación pastoral de la comarca.

Segunda fase en Urola-Erdia

Tras la primera fase experimental, el proyecto e-Pasto se trasladará en 2014 a la comarca guipuzcoana de Urola-Erdia. El sector agropastoral de ambas zonas tiene en común la utilización de equipamientos para delimitar las zonas de pasto, así como la obligación de respetar los límites catastrales y las zonas donde el pastoreo no está permitido (humedales, zonas de regeneración forestal o de actividades de ocio, áreas de riesgo como simas y precipicios, etc.). La posibilidad de conducir el ganado a distancia supone una ventaja para cualquier tipo de pastoreo cuando se trata de desplazar la manada a la zona deseada, gestionar los pastos disponibles o reagrupar el rebaño. 

El dispositivo deberá ser pequeño y ligero, de manera que pueda estar integrado en los tradicionales collares y, al mismo tiempo, ser lo suficientemente robusto frente a golpes, rozamientos o mordeduras para evitar que se pierda o quede inutilizado.

También deberá adaptarse al comportamiento del ganado, y en este sentido habrá que planificar una fase de adiestramiento de las reses para acostumbrarles al uso del collar y estudiar sus reacciones, de manera que pueda establecerse qué proporción y qué tipología de animal (adulto, joven, dominante, líder…) debe equiparse con el dispositivo electrónico en cada rebaño. Igualmente, será necesario estudiar el mecanismo de interacción más adecuado para cada ganadería: tipo de estímulo, duración, frecuencia e intensidad del mismo. En este sentido, se barajan diversas opciones, desde la reproducción de la voz del ganadero, de un silbido, de los ladridos de un perro o de los propios mugidos del líder de la manada, hasta señales o impulsos de tipo vibración o pequeñas descargas eléctricas, así como la combinación de varias de ellas.

Por otro lado, el usuario del sistema no sólo podrá geo-localizar a la manada y dirigirla a la zona deseada, sino también recibir alertas a través de alarmas o mensajes al móvil cuando se detecte algún problema, como un animal inactivo, con síntomas de enfermedad o fuera de la zona delimitada.

Vacas pirenaicas en zona nevada

Vacas pirenaicas en zona nevada

INVAC

El desarrollo del prototipo integrará diferentes elementos: por un lado, el desarrollo del collar propiamente dicho que incluya el dispositivo electrónico, que es responsabilidad de la Escuela Superior de Tecnologías Industriales Avanzadas ESTIA, radicada en Bidart; por otro, el desarrollo de las bases de datos y del programa de interfaz, tarea asumida por el Centro de Tecnologías de Interacción Visual y Comunicaciones Vicomtech-IK4, con sede en el Parque Tecnológico de Donostia. Los requisitos técnicos del proyecto incluyen garantizar la autonomía en cuanto a energía eléctrica del dispositivo que porte el animal, así como la accesibilidad a distancia mediante ordenador y teléfono móvil. Igualmente, la solución propuesta deberá soportar condiciones climáticas en cuanto a temperaturas extremas (heladas e insolación), lluvias y relámpagos, además de ser inmune a los campos electromagnéticos.