Boletín Agrario Agricultura, Medio Ambiente y Mundo Rural

La Unió denuncia "estrategias de abuso" por parte de algunos comercios sobre los citricultores

Denuncian que comercios citrícolas pretenden pagar sólo el 50% de la cosecha y además en cuatro años

La Unió de Llauradors

LA Unió de Llauradors ha denunciado que "la actitud abusiva del comercio citrícola no tiene fin" y como ejemplo ponen el caso de un comercio que pretende pagar únicamente a los agricultores el 50% de la cosecha comprada en su día y encima en cómodos plazos durante cuatro años.

Naranjas cortadas

Se trata de un caso de la pasada campaña que ha dado a conocer LA UNIÓ de Llauradors en su tradicional encuentro por estas fechas con los medios de comunicación de Castellón.

La firma comercial citrícola de Nules, Vicente Castelló, remite durante estos días a los agricultores a los que les compró la cosecha de la pasada campaña una carta donde les indica textualmente que "como consecuencia de la crisis económica por la que atravesamos lamentamos tener que comunicarles que nos es imposible atender nuestros compromisos de pago en los plazos estipulados". Por ello han presentado en el Juzgado Mercantil de Castellón la comunicación prevista en la Ley Concursal para salir de la situación y poder continuar con la actividad normal de la sociedad.

Esta empresa utiliza en la carta el lema "Unos tienen clementinas pero nosotros tenemos Éxito" –marca comercial de la entidad, lo que pone de manifiesto a juicio del secretario general de LA UNIÓ, Ramón Mampel, que "el éxito es de aquellos que juegan con el sudor de nuestra frente".

El acuerdo de la empresa con las entidades financieras propone, como cancelación de la deuda con los agricultores, que acepten estos dejar de cobrar el 50% de la cosecha y el otro 50% a abonar en cuatro plazos hasta el año 2015 (12,50% antes del 31 de diciembre de 2012, 12,50% antes del 31 de diciembre de 2013, 12,50% antes del 31 de diciembre de 2014 y 12,50% antes del 31 de diciembre de 2015).

LA UNIÓ señala que la actuación de comercios como el mencionado son intolerables y demanda a la Generalitat que no permita por más tiempo la actividad comercial de los mismos. Ramón Mampel indica que "si la campaña pasada que no fue de las peores para los productores si tenemos en cuenta las anteriores, no quiero ni pensar lo que puede pasar en la actual donde el mercado está muy parado y los precios son muy bajos para los agricultores. Hay total indefensión y nadie hace nada por evitarlo".

LA UNIÓ indica que el estado actual de la campaña citrícola es muy preocupante y las cotizaciones que perciben o percibirán, en el mejor de los casos los agricultores, se sitúan claramente por debajo de los costes de producción; por lo que no descarta realizar acciones de protesta.