Texto perteneciente al capítulo 17 de la «Guía práctica de la fertilización racional de los cultivos en España», dedicado al maíz (cereales de primavera)
Descripción de las necesidades nutricionales del maíz que, aunque similares a las de otros cereales como trigo y cebada, debido a sus niveles de producción suelen ser mucho más elevadas. Se describen el ritmo y la forma de extracción de los nutrientes por parte de Zea mays, centrándose especialmente en los nutrientes principales (nitrógeno, fósforo y potasio).
Texto perteneciente al capítulo 16 de la «Guía práctica de la fertilización racional de los cultivos en España», dedicado a los cereales de invierno
El nitrógeno es el principal elemento mineral y el de mayor influencia en el rendimiento de los cereales. En conjunción con fósforo y potasio, estos tres minerales representan la base fundamental de la nutrición del trigo y la cebada, aunque los cereales también necesitan otros elementos, como calcio, manganeso y, especialmente, azufre.
En el siguiente texto se describen los requerimientos de «fertilidad física» para el cultivo del maíz (Zea mays). Se centra en las principales características físicas del suelo, como son su capacidad de retención de aguas, su aireación y temperatura, incidiendo en la importancia de mantener estos valores a sus niveles correctos.
El nitrógeno es el principal elemento mineral y el de mayor influencia en el rendimiento de los cereales. Sin embargo, es necesario que también estén presentes en su dosis adecuada los otros dos minerales más necesarios en la fertilización de los cereales: fósforo y potasio. Dosis elevadas de nitrógeno con carencias de potasio debilita a las plantas frente a enfermedades y baja su rendimiento
Además de los elementos principales, nitrógeno, fósforo y potasio, los cereales también absorben cantidades importantantes de calcio, magnesio y, sobre todo, de azufre. Aunque nunca a niveles tan elevados como los tres elementos principales, su correcto aporte es de gran importancia para la agricultura intensiva, como por ejemplo las variedades enanas de alto rendimiento.
El informe describe detalladamente la utilización de las diferentes técnicas de mantenimiento del suelo en cultivos leñosos, barbechos y métodos de siembra en cereales grano, girasol, maíz forrajero y otros forrajes en España durante 2011. Informe perteneciente a la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos Cultivos (ESYRCE)
Las segundas previsiones realizadas por las Cooperativas apuntan a una cosecha de cereales en España para 2011 que se situará más de dos millones por encima de la media de los últimos 20 años, tras los bajos registros de los dos últimos años (casi tres millones más que en 2010). Unas previsiones que contrastan con las de otros países de la Unión Europea, perjudicados por las sequías.